Ingredientes:
• 1 litro de leche
• 60 gr de manteca
• 60 gr de harina
• nuez
moscada sal y pimienta
Preparación:
Derretir la manteca en una sartén a fuego bajo, y cuando
este completamente fundida tamizar la harina y agregarla. Cocer por algunos
minutos removiendo con cuchara de madera, evitando que se queme, hasta que
comience a cambiar de color, pero cuidado, apenas tiene que cambiar muy poco de
color. Si no se cocina correctamente tendrá gusto a harina cruda, y si nos
pasamos, se quemará.
Calentar la leche hasta que hierva, y agregarla de a poco en
la preparación, removiendo constantemente con un batidor de alambre. Es muy
importante agregar la leche de forma paulatina (nunca toda junta), y siempre
remover con el batidor de alambre. Esto evitará que se formen grumos.
Agregar sal, pimienta, y nuez moscada a gusto.
Inevitablemente se formarán grumos, pero a medida que sigamos
removiendo la preparación irán desapareciendo. Hay que cocer la salsa por unos
10 minutos (a fuego mínimo), de esta forma quedará muy suave y sabrosa.
En caso de que nos queden grumos, se soluciona facilmente
con una batidora o licuadora.
Las proporciones son para obtener la consistencia clásica,
pero variando la cantidad de harina y manteca podemos hacerla más espesa o más
fluida.
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